Hablemos sobre... la sociedad actual

Estamos en una época de la historia con más libertad en lo que se refiere a gustos, religiones, ideologías y demás, o eso dicen, siempre y cuando pienses de una determinada forma, hagas ciertas cosas conforme a tu edad, aunque si la haces antes mejor (pretendemos crecer antes de tiempo) y por supuesto te tienes que comportar de una forma determinada.

El hecho de que sea una chica joven de 21 años no significa que me tenga que gustar beber hasta coger el tono o emborracharme, que me guste ir a discotecas a bailar, a ligar o a “relacionarme”, no tengo porque haber tenido relaciones ni una relación larga o abierta, etc. Y no es como me dicen que me estoy perdiendo esto, es que vives encerrada, es que no has visto mundo, no has salido de tu zona de confort. Con esto no digo, y me adelanto a los comentarios que menosprecie a los que sí les gusta ir a discoteca o beber, si les gusta y son felices adelante no es negativo ni mucho menos a mí simplemente es que no me gusta, no va conmigo, y si algo he sacado en claro durante estos años es que cada uno tiene una forma de ser que es diferente, a nadie le va a gustar lo mismo que a ti (al 100%), no le vas a gustar a todo el mundo ni hace falta que lo hagas, sería agotador quedar bien con todos y tampoco hace falta ir detrás de la aprobación de nadie.

Hay que respetar a las otras personas, sus gustos, pensamientos y creencias. Ser tú mismo porque en el momento en que una persona te falla te vas a tener a ti, pero si ni siquiera tienes eso porque has estado intentando encajar con todos los que has encontrado, ¿qué te queda?

Somos seres sociales, eso lo entiendo y en mi caso, me relaciono con más personas de lo que lo hacía antes, pero relacionarse no implica tener que hacer las cosas que le gusten a la otra persona cuando a ti no, siempre se puede llegar a un acuerdo de cosas que gustan a las dos personas.

Me gusta estar en mi casa temprano, me gusta levantarme temprano, me gusta más el día que la noche, no me gustan las discotecas, no me gusta beber (lo he probado y no me gusta ni el sabor ni como me deja el cuerpo), no me gusta tener en mi vida a personas que para divertirse necesita una o dos copas para ser más sociable, yo quiero que la persona se quiera a sí misma, se conozca y que no tenga miedo a decir lo que piensa pero sobrio, que sea sincero, no me vale el “para no quedar mal”, usar excusas u omisiones , la sinceridad es una de las cualidades más importantes para mí en una persona.

En realidad, se podría resumir todo en dos cosas: respeto y educación.

No me gusta la hipocresía que existe, el hecho de tener que ser de una manera impuesta por la edad, el género y demás no me gusta.

Ahora mismo estoy en un momento de mi vida en el que estoy construyendo una relación conmigo misma y al mirarme hacia dentro vas descubriendo lo bonito de una persona que no conocías y es a ti misma. Si no lo has hecho es algo que te recomiendo. También conoces tus puntos fuertes, tus puntos débiles, vas formando una opinión sólida sobre temas de los que has oído hablar y siempre has estado de acuerdo sin realmente saber bien de qué se habla. Te ayuda a ver en qué eres realmente buena, qué es lo que más disfrutas haciendo y al final terminas viendo hacia dónde quieres ir, a marcarte metas y objetivos.

Por favor, no caigáis en estos pensamientos, si os gusta ir a una discoteca no dejéis que una persona a la que no le guste os menosprecie, si os gusta quedaros en casa un viernes por la noche no permitáis que una persona a la que le gusta más la noche os diga lo que tengáis que hacer y así con todo. Tenéis que ser vosotros mismo, si queréis probar cosas, adelante, pero probadlas porque realmente queréis no por presión de tus amigos o personas cercanas.

¿Cuál es tu opinión sobre este tema? ¿Te ha pasado algo parecido? ¿Te has sentido identificada?

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